Historia que contar

Y así parte su día, hace varios años que es una mitómana con certificado de doctorado en la mejor de las universidades.
Ya no toma leche, solo café. Es mejor sentarse a vivir con poca materia grasa encima.
Con el tiempo solo deja pasos, no huellas, es más que la lástima encubierta. Hoy es sábado y hace una llamada: Estación Plaza de Armas, ya inventó una historia para no quedar mal. (estúpidamente looser)
La puta, así se considera así misma: entregó su cuerpo sin deseo a más de un hombre ( solo a dos ). Mirándolos a la cara y fingiendo, ja permita que me ría.
Parece que mira pero en verdad vive ''ida'' en sus propias visiones, parada frente a un espejo que en verdad es la puerta del tren comparándose con el resto del anden, se ve inhumana, pocas carnes entre sus huesos, falta de trasero, y con exceso de bondad; pasa sus manos sobre su abdomen, lo encuentra abultado pero sabe es por el exceso de líquido, se apacigua ante esa idea, tiene fuerza de voluntad y ve en distinto modo la vida: ya no usará pantalones, es muy notorio.
Durante la tarde fue participe indirecta de una manifestación vegana: es una buena forma de empezar, se siente capaz de hacer muchas cosas, aunque a mi parecer resultaría absurdo, me da miedo.
He pedido varias veces que muere, pero es como la hierba mala, como en la películas, igualmente ilógico.
Nunca ha tratado de llamar la atención, aún así lo ha logrado, ya no discute, solo acata y calla, eres como los perritos parece, más remordimientos me causas niñita ...
dime si ahora que sabes de que están echas las papas fritas de los patios de comida, de las vianesas, los chorizos, las galeas, los helados y toda esa comida, seguirás comiendo?
El mundo hace que consigas aquello que quieres
no se supone que deberías sentirte contenta?



Guarda los secretos de la puta en la maleta, compra dos boletos de avión y largarte de aquí.

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